viernes, 5 de abril de 2013


Es bueno tener una familia. Es como un refugio, como un clan donde somos todos para uno y uno para todos. A veces se van un poco de mambo y siento que me asfixian, como otras veces agradezco cuando me pusieron los “puntos” –por decirlo de alguna manera- y me mostraron que todo se consigue mediante el esfuerzo de cada uno, que no siempre se consigue lo que se quiere y que cuando no me dejaban salir por alguna cagada/baja nota era para mostrarme que hay que dar un poco de uno para tener lo que deseo. Yo sé que quieren lo mejor para mí, pero muchas veces pienso que necesito un poco de libertad, tomar mis decisiones y aprender a salir del nido. Sin embargo, saber que ellos están siempre ahí, incondicionalmente, que me quieren y me apoyan, que me dan fuerzas y seguridad... eso es lo más.Porque cuando el afuera te satura, se pone peligroso, denso o te aburre con tantas incoherencias, no hay nada como volver a casa.
Es cierto que a veces queda mal decir que sos "familiera" o que es un quemo que tus padres te cuiden. Pero en el fondo, todos sentimos lo mismo: qué suerte que es tener una buena familia...

No hay comentarios:

Publicar un comentario